Sufro una especie de síndrome que se caracteriza por dudar de todo o casi todo lo que me rodea cuando tan sólo algo va mal... es un síndrome malo, porque me hace pensar en negativo de cosas que a priori iban bien unos días antes cuando encuentro una piedra en el camino. Me gustaría no sentir eso, me gustaría ser una persona más optimista y saber racionalizar más mis miedos, absurdos casi siempre.
Supongo que es falta de autoestima, de confianza en mi misma...
Cuando llevo una piedrecita en el zapato dándome la murga, el dolor casi inapreciable a lo largo del día asciende por mi pierna y se instala en la máquina de pensar... la piedra entorpece el normal funcionamiento del complicado engranaje del pensar... así que como no llevo un antivirus instalado de serie, no me percato de que hay un fallo grave en el sistema, y que cualquier tarea que realice a partir de la llegada de la piedra llevará implícito un error de base.
El mecanismo funciona incluso con más rapidez de la normal y establezco reglas que no tienen sentido. Pero les busco uno inmediatamente y la actividad crece a pasos agigantados inventando nuevas y cada vez más absurdas teorías.
Por suerte, últimamente, ese es el final del proceso. La máquina explota y expulsa la piedra de vuelta al zapato. La funcionalidad de mi pensamiento e incluso de mis sentimientos se restablece poco a poco. Soy capaz de formatear el sistema completo y no realizar nuevas tareas que tiren por la borda años de trabajo, de risas, de abrazos, de historias...
Antes no era así... me caracteriza una irrefrenable manera de actuar, soy impulsiva, rápida, activa. Antes no le daba tiempo a la máquina y actuaba antes de que la piedra hubiera sido expulsada de entre mis muelles. Resultado: error fatal.
Es difícil luchar contra los propios mecanismos aunque los reconozcamos como dañinos y fatales... cuesta luchar contra la tristeza y el pesimismo, contra la anti-autoestima...cuesta incluso cuando odias llorar cuando nadie entiende por qué carajo lo haces...
Pero se puede intentar. Y en eso estamos.
